Debido a la climatología seca y calurosa de Córdoba, los habitantes de la ciudad, primero los romanos y más tarde los musulmanes, adaptaron la tipología de casa popular a las necesidades, centrando la vivienda en torno a un patio, que normalmente tenía una fuente en el centro y en muchas ocasiones un pozo que recogía el agua de lluvia. Los musulmanes readaptaron este esquema dando entrada a la vivienda desde la calle a través de un zaguán y colocando vegetación abundante para aumentar la sensación de frescor.
Tipos de patios:
Existen dos tipos claros de patios: un primero de casa unifamiliar donde las estancias se distribuyen alrededor de este. Suele estar enclaustrado y el suelo es enlosado o de mosaico empedrado. Un segundo, de casa de vecinos, hoy en día menos populares, desde donde se accede a las viviendas. La vivienda suele tener dos plantas, con lo que el patio se enriquece con balcones corridos, escalera y tejadillo. Es frecuente el pozo en lugar de la fuente y lavadero común, y en algunas encontramos albercas.
¿Dónde se ubican?
El barrio más característico es el del Alcázar Viejo, entre el Alcázar y la parroquia de San Basilio, aunque también los encontramos por el barrio de Santa Marina, alrededor de San Lorenzo y la Magdalena. En el entorno de la Mezquita-Catedral, el barrio de la judería presenta también ejemplos de gran belleza y antigüedad. El exponente más bello lo encontramos en el Palacio de Viana, que ofrece doce patios diferentes.
Concurso de Los Patios de Córdoba
Desde el año 1921 el Ayuntamiento de la ciudad organiza durante la primera quincena de mayo un concurso de Patios, en el que los propietarios de estos engalanan sus viviendas con ahínco para conseguir el prestigioso galardón ofertado por el Consistorio. Paralelamente se celebra un festival con numerosas actuaciones folclóricas donde se dan cita los mejores cantaores y bailaores de la tierra.
En diciembre de 2012, Córdoba recibió otro distintivo más: La Fiesta de Los Patios fue reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Hay que felicitar a las personas que cuidan estos patios, con esmero, quitando hojas y flores muertas, dejando el suelo impoluto y sin descuidar el riego tan necesario en una ciudad tan calurosa. El sonido del agua, el aroma de las flores y plantas aromáticas, el agrupamiento de las plantas, la disposición geométrica en muchos de los patios, el abigarramiento o la anarquía de otros, los colores resaltando sobre el blanco de las paredes...son todo un lujo para los sentidos.
No vayan a pensar que en un día de visita se pueden ver todos pues creo necesario al menos tres. De todas formas al ser una fiesta anual si solo se dispone de un día, siempre podremos volver otro año.
Más información: http://www.turismodecordoba.org/patrimonio-humanidad.cfm
4 comentarios:
Preciosos los patios cordobeses. Me ha encantado ver tus fotos, Mercedes y es que las flores dan vida a cualquier lugar y esa exhuberancia de los patios es cautivadora. Gracias.
un beso.
Maravilloso...
Gracias por traerlos !
Saludos
Muchas gracias, Estrella. Realmente es un goce para los sentidos. Besos.
Estos patios dan vida a quienes los disfrutan. Gracias, a ti, Mark. Un abrazo.
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