Sopa de ajo
Ingredientes para 4 personas
Preparación. Tiempo de realización 5 minutos
1. Se pone una cazuela preferiblemente de barro al fuego con aceite de oliva.2. Se añaden los ajos partidos, antes de que el aceite esté muy caliente, con objeto de que se doren y no se quemen.
3. Se añade el pan cortado en rodajas finas, mezclandolo con los ajos y el aceite. Se echa el agua caliente, la hierbabuena y se deja hervir unos minutos (entre cuatro y seis minutos). Se sirve muy caliente.
Foto: Museo etnológico de Medina Sidonia (Cádiz). mmhr (diciembre-2010).
6 comentarios:
Pasamos por el tiempo, dejando atrás cálidos recuerdos, memorias de un pasado a veces no tan lejano, porque algo de él aún no queda atrás. La vida fue sencilla a pesar de su dureza, el pobre alzaba la vista para observar la riqueza, pero con cuanto amor sabían inundar su mesa, mesa y sillas como a medida... como a medida que resistían el tiempo, máquinas de coser de antaño... prendas para la abuela y el ñaño, y aquella caja de noticia y música... dulce compañía en la tristeza, y todo este grato recuerdo, con sabores de una deliciosa sopa de ajo.
Un abrazo Mercedes.
Hola, Pensador. Ver este sencillo y pobre comedor me transportó a la casa de mis abuelos y me trajo el sabor de la sopa de ajo que hacía mi madre. Un abrazo.
También se echan mas cosas; aquellas que nos hacen ser únicos por tener amor..
Hacen falta unos mantecados, unos villancicos que aunque seamos pobres,¿no podría ser un dulce de Navidad para cada uno?...
Felices entradas en este año amiga...y mucha música por escuchar. No olvides que estás en el corazón de mucha gente y eso alimenta el espíritu.
Un beso
Hola, Mercedes, qué tal…?
Una foto vale más que mil palabras… y esa foto habla más que… como decíamos en esos mismos tiempos: «María la de la tienda»
Has recreado el pretérito en la acción del presente.
Felices Regalos Magos, que no reyes que soy republicano. Y muy Feliz Año.
Abrazos!
Claro que sí, Buscador, no por tener un escenario diferente en nuestras casas vamos a ser más felices. Entonces las navidades podían ser muy entrañables; creo que con el plasma, por ejemplo, presidiendo la cena de nochebuena se ha perdido mucho calor familiar. Gracias, y la música que no falte. Feliz año. Un beso.
Hola, Juande. Esa foto y otras que tomé en el mismo museo dan lugar para escribir tanto; se huele el ambiente de nuestra niñez, al menos de la mía, de mis primeros cinco o seis años, luego todo empezó a cambiar..., para bien o para mal. Feliz año. Un abrazo.
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