Puerto de Ribadeo (Lugo, Galicia). Fotos. mmhr/2009

sábado, 30 de enero de 2021

Positividad, siempre

Con la que nos está cayendo, más vale ser positiva. Hace un año solo pensaba en que acabara el curso y empezar una nueva etapa de mi vida y disfrutarla...Bueno, también pensaba en otros asuntos: las guerras, el hambre, el cambio climático, el cumplimiento de los Derechos Humanos, etc, etc., que siempre están en mi pensamiento y humildemente intento mejorar en la medida de mis posibilidades.

Lo que pasa es que me pongo a pensar y no paro...

Estamos ante una saturación de información sanitaria, económica, política, social, generalmente bastante negativa, real casi siempre, la mayoría de las veces. Por supuesto que hay fake news, pero yo me pregunto ¿es que no interesan las noticias positivas? ¿Hablar de temas, situaciones, que siguen ocurriendo y que ponen el punto de mira en la bondad humana? Por cierto, ¿cómo irá la pandemia en la mayoría de los países pobres del mundo de los que prácticamente no se dice nada? Ellos no importan. ¿La guerra de Siria? ¿La situación en Nicaragua, Haití, la Franja de Gaza, Sierra Leona o Bangladesh?

¡Ojo! No pretendo que haya censura en los medios, lo que me gustaría es que se intercalaran informaciones de todo tipo. Cualquier telediario, cualquier periódico, trata los mismos temas, quizás con una mínima diferencia, pero lo mismo...Por no hablar de las redes sociales...

Creo que tengo una idea de lo que está ocurriendo, no solo en España; creo que tengo buena información, pero siento que a veces me desborda la negatividad que propagan. Además, parece haberse generalizado hablar a gritos, sí, aquel modo de hablar que parecía una característica de programas del corazón, se está normalizando tanto en los informativos como debates. No lo soporto.

Nuestro mundo ha cambiado, nuestra vida diaria, el futuro; parecía que éramos protagonistas de una película de ciencia ficción, pero no, es la realidad. Cuando dicen "cuando llegue la nueva normalidad", yo pienso, esta es la nueva normalidad y más vale acostumbrarse a ella. Claro, que la situación actual mejorará, más le vale a los laboratorios seguir con las pilas al 100%. Las multinacionales farmacéuticas se frotan las manos con las enormes ganancias...

La vida que tuvimos no creo que vuelva a ser igual, al menos pasará mucho tiempo, más de lo que la mayoría cree. Todavía tenemos los efectos de la crisis de 2008, así que reflexionemos. ¿Vamos a dejar que la situación de negatividad que tenemos nos hunda? Yo no, por supuesto. Lo que pasa es que yo vengo de una generación que tuvimos que ganarnos a pulso un cierto bienestar. Digamos que tengo cierta capacidad de adaptación. ¿Qué vida tienen nuestros hijos? Con la crisis del 2008 nos dimos cuenta que muchos de los derechos sociales adquiridos se iban al baúl de los recuerdos. ¿Qué pasará con nuestros nietos? Mejor no lo pienso.

Dije que iba a ser positiva, y voy a serlo. Estoy en mi burbuja, muy limitada, desde marzo. Quizás, ni siquiera pueda ponerme la vacuna cuando me toque ("habrá que valorarlo, dice el médico"); bueno, a lo mejor resulta que lo que tuve en enero de 2020 fue causado por el COVID19 y por eso no me he contagiado. En fin, mi carácter es optimista, así qué como dije voy a ser todo lo positiva que pueda y a ver qué pasa. Sean positivos, y, por favor, no griten, parece que también es contagioso y no tenemos vacuna. Sean críticos con la información, beban de diversas fuentes, contrasten, no se crean que la Tierra es plana. mmhr/2021

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